domingo, 20 de junio de 2010

El nombre inequívoco y uniforme del vacio (Amor)




















El corazón se siente vació, hay una sensación de inconformidad en el momento, un hueco, ¿un deseo insatisfecho acaso?, pero haciendo un escrutinio minucioso tratando de justificar razones para tal estado no las hay, en realidad no las hay¿Se puede saber acaso la razón de la inconformidad dentro de este escenario? ¿Acaso hay una respuesta? Siendo condescendiente con el deseo de respuesta podría decirse que la razón de tal estado es que no sean las cosas tal como las deseamos, pero ¿es acaso que no estamos hablando del estado normal de los sucesos en el mundo? ¿o existe alguien para quien todas las cosas suceden tal como el individuo las desea? Ni el humano mas poderoso del planeta económica y bélicamente hablando, tiene tal poder de acción, entonces claramente justificar con esta razón no tiene ningún sentido.
Seguramente así se sintió Einstein cuando se dio cuenta que nada de lo que los seres humanos hagamos como especie alteraría el curso del universo, mucho menos como individuos, también Nietzche debió sentir lo mismo al escribir la canción del baile, yo así lo creo, pues es la misma sensación de no tenerle miedo a nada, solo los que realmente no tememos sabemos que es eso, solo nosotros sabemos lo que se siente, solo nosotros en las alturas sabemos que los grandes y los que escarban en la basura, tienen el mismo sentimiento en su corazón: Soledad y resignación.
Hay que aceptar lo que somos y la función que desempeñamos, la felicidad es posesión de nacimiento, la tranquilidad es igual, nuestra mente debe ser la guía, el sentimiento nubla la mente y debe a eso su gran efectividad en los momentos para los cuales esta diseñado, se supone que el instinto debe indicar inequívocamente cuales son esos momentos, pero definitivamente a muchos les salio estropeado, pues confunden los caminos y las acciones por consiguiente al no saber cuando la mente debe entrar en acción o viceversa, surgen los conflictos que se les vuelven irresolvibles para toda la vida.
Los que vivimos en las alturas, somos fuertes por naturaleza, pues para darse cuenta de tales cosas es indispensable serlo, para poder seguir viviendo felices, fuertes de espíritu y de corazón, grandes y únicos, por eso se llame como se llame aunque es inequívoco el nombre y uniforme, somos tan grandes que siempre lo conseguiremos, no hay que desfallecer, no hay que sucumbir ni desesperarse, porque nuestras metas y todos los propósitos nuestros siempre y cuando seamos constantes serán como la muerte, absolutamente segura aunque no tengamos certeza de cuando.
Hombres superiores siempre ved adelante y aprended a usar el látigo mas fuerte: El de vuestras mentes...


Sean Felices.....